La víctima firmó un poder pensando que estaba regularizando la escritura de su casa como le había asegurado la procesada quien la indujo a ir al notario

La sentencia que condena a las dos procesadas ha sido dictada por la Audiencia de Cádiz. – LA VOZ

La Audiencia Provincial de Cádiz ha condenado a dos vecinas de Chiclana a dos años de cárcel por estafa por engañar a la tía mayor de una de ellas para que le diera poderes notariales sobre la vivienda que tenía por herencia en propiedad y posteriormente venderla y quedarse con el dinero.

Según se recoge en la sentencia dictada por la Sección Tercera, los hechos se remontan a 2011. Una de las acusadas tenía problemas económicos que le impedían poder hacerse cargo de la hipoteca de su casa. Agobiada acudió a pedir consejo a una amiga (la otra procesada) quien le recomendó que buscara ayuda en algún familiar. Visitó entonces a su tía que vivía junto a un hijo en Chiclana, en una casa que le pertenecía por herencia desde el fallecimiento de su marido cinco años atrás.

Dicha vivienda había sido construida por el esposo de la víctima durante años, y únicamente como título disponía de la escritura de la parcela pero no estaba declarada como obra nueva. Aprovechando esta circunstancia, argumenta el fallo, la principal imputada hizo creer a su tía que estaba dispuesta a ayudarle a tramitar la escritura completamente.

Con este objetivo supuestamente la acompañó a una notaría de Chiclana, diciéndole que iban a firmar un documento que le permitiría regularizar su casa y que respondiera a todo que sí, siguiendo a su vez las indicaciones dadas por la otra condenada. Y de esta manera consiguió que la tía le otorgara un poder general a su favor en el cual se le incluía la facultad de vender fincas y/o participaciones indivisas de estas.

Posteriormente, al entender que necesitaba también la firma de su primo, analfabeto y con una minusvalía del 65 por ciento, se las ingenió para tras decirle que iba a hacer unas gestiones para quitarle una multa que le habían puesto al circular en moto sin seguro, llevarlo a la misma notaría y, de la misma forma que con su tía, conseguir que le otorgara otro poder general.

Como continúa la sentencia, una vez que tuvo a su favor, ambos poderes y concertada con la otra procesada se gestionó una escritura de aceptación de herencia y adjudicación, sin que sus familiares tuvieran noticia de ello. El siguiente paso del engaño fue acudir a otra notaría en Sevilla y allí, usando los poderes otorgados, vendió la vivienda de la tía por 50.000 euros y con cuyo importe satisfizo las deudas hipotecarias que pesaban sobre su casa que ascendían a unos 20.000 euros, sin que conste que hicieron con el resto del dinero.

Se enteró un año después

Según el tribunal, ni la víctima ni su hijo tuvieron nunca constancia de ninguna de estas operaciones. Según recoge el fallo, se enteraron un año después de la venta cuando al no recibir el aviso del pago del IBI como el resto de sus vecinos acudió al Ayuntamiento de Chiclana a preguntar y allí le indicaron que su finca ya no estaba a su nombre y además pertenecía a una empresa promotora de viviendas.

Ante tales hechos y al entender los magistrados que hubo un engaño intencionado condena a las dos procesadas por un delito de estafa a dos años de prisión. La Fiscalía solicitaba cuatro pero se les ha aplicado la atenuante de dilaciones indebidas. Deberán indemnizar a la afectada por los perjuicios morales causados en la cantidad de mil euros. Se declara además la nulidad de la escritura. Contra esta sentencia cabe recurso de casación ante el Supremo.

lavozdigital.es

Next Post

Login to your account below

Fill the forms bellow to register

Retrieve your password

Please enter your username or email address to reset your password.